EEUU nacionaliza su banca ¿A las puertas del corralito?

Fannie Mae y Freddie Mac son titulares o garantes de casi la mitad, 5,2 de los 12 billones de dólares que mueve el mercado hipotecario estadounidense. Han perdido cerca del 80% de su valor en Bolsa en lo que va de año, más de un 46% en cinco días. Su derrumbe comenzó el 7 de julio con los comentarios de un analista sobre posibles problemas financieros de ambas firmas. A ello se sumaron declaraciones como la del el ex presidente de la Reserva Federal de San Luis William Poole, quien las calificó de "insolventes"."Simplemente son demasiado grandes. Habrá una gran presión política para que sean rescatadas", explicó el analista de Insight Investment Phil Barleggs en una nota a sus clientes. Esa opinión empieza a ser cada vez más generalizada en Wall Street, que confía en que si la Reserva Federal de Estados Unidos apoyó el rescate de Bear Stearns, también hará algo con estas dos compañías.

Precisamente, el secretario del Tesoro de EEUU, Henry Paulson, se apresuró a lanzar un mensaje de calma a los mercados al asegurar que el Gobierno quiere que los gigantes hipotecarios Freddie Mac y Fannie Mae sigan adelante con su labor. "Nuestro objetivo es respaldar a Fannie Mae y Freddie Mac en su estado actual mientras llevan adelante su importante misión", señaló Paulson en un comunicado.Fannie Mae, creada en 1938 como parte del "New Deal" que sacó a EEUU de la Gran Depresión, y Freddie Mac adquieren hipotecas de los bancos y otros prestamistas privados y las combinan en paquetes de inversión, lo cual aumenta la liquidez del mercado hipotecario.El diario "The New York Times" ha señalado que el Gobierno se plantea si asumir el control de una o ambas compañías, lo que dejaría a las acciones cotizadas en bolsa sin valor alguno y forzaría a los contribuyentes a financiar las pérdidas por las hipotecas que las empresas poseen o han garantizado. En lo que todo el mundo parece coincidir hoy es en que el Gobierno no permitirá que las compañías se vayan a pique. El "Times" menciona, de todos modos, que si el gobierno garantiza los cinco billones de deuda garantizada o en propiedad de las firmas hipotecarias se duplicaría el monto de la deuda pública de EEUU.

Rusia invierte en Fannie y Freddie

Los analistas temen que la quiebra de cualquiera de las dos hipotecarias semiestatales y cotizadas puede provocar un caos en el sistema financiero estadounidense y en la economía del país. Pero no sólo. Con Fannie y Freddie han contraído riesgos buena parte de las entidades financieras de EEUU y de medio mundo.

Rusia ha invertido la quinta parte de sus reservas en oro y divisas en obligaciones de las grandes agencias inmobiliarias semiestatales de EEUU. A 1 de enero de 2008, el Banco Central de Rusia había invertido 100.800 millones de dólares en el mercado hipotecario estadounidense. Concretamente, en Federal Nacional Mortgage Association (Fannie Mae), Federal Home Loan Mortgage Corporation (Freddie Mac) y Federal Home Loan Banks. En el curso del año pasado, el Banco Central ruso había aumentado en un 150% sus inversiones en el mercado hipotecario de EEUU. Aún más, el Ministerio de Finanzas ruso anunció sus planes de invertir en obligaciones de Freddie Mac y Fannie Mae parte del inmenso Fondo de Estabilización del país."El problema de si tener o no el dinero en obligaciones estadounidenses es un asunto más político que económico", señaló Maxim Tishin, experto en inversiones de la financiera UFG Asset Management. Gazeta.ru recordó las promesas del titular de Finanzas ruso, Alexei Kudrin, de ayudar con fondos a Occidente a superar la crisis financiera, y señaló que "la inversión en títulos de Freddie Mac y Fannie Mae es una asistencia más que oportuna a EEUU".

IndyMac, nacionalizado


Esta semana pasada todas las miradas estaban puestas en las hipotecarias semipúblicas. Pero el que ha necesitado ser rescatado ha sido IndyMac, uno de los mayores prestamistas hipotecarios privados de Estados Unidos, que reabrirá sus puertas el lunes bajo control del Estado, tras ser intervenida el viernes por el Gobierno.

"Cuando reabramos el lunes iniciaremos el proceso de comercializar este banco para intentar que vuelva al sector privado. Esperemos que eso dure unos 90 días", dijo el portavoz de la FDIC, David Barr, en declaraciones a la CNN. La caída de IndyMac representa el segundo mayor descalabro de una institución financiera en la historia estadounidense.La firma, que sufrió una presión irresistible esta semana ante la imparable fuga de depósitos, reabrirá el lunes bajo control federal con el nombre de IndyMac Federal Bank FSB. La compañía sufrió fuertes pérdidas durante los últimos nueve meses debido al elevado índice de morosidad entre sus prestatarios, lo que la obligó a realizar fuertes recortes laborales, incluido uno esta semana que redujo su plantilla hasta los 3.400 empleados frente a los 7.200 anteriores.La empresa, con sede en Pasadena, California, tenía 32.000 millones de dólares en activos el pasado 31 de marzo.La FDIC asegura hasta 100.000 dólares por depositario por institución e incluso más en ciertas circunstancias. Los depositarios con cantidades mayores pueden recibir sólo una porción de su dinero.

El G-8 debate sobre el hambre ante un menú de 20 platos

Ils s'ont partagé le monde, plus rien ne m'étonne... (se han repartido el mundo. Ya nada más me sorprende)

Tiken Yah Fakoli

El G-8 (los 8 países más industrializados del planeta) se han reunido en Japón para discutir sobre la crisis alimentaria y el hambre... ante un menú de 20 platos. Bush, Merkel, Medvédev, Brown, Sarkozy, Berlusconi, Fukuda y Harper devoraron las especializades preparadas por el único chef japonés con una estrella Michelin, Katushiro Namakura. Los 8 'grandes' pudieron hincar el diente a suculentos platos como sopa de almejas, congrio con azucenas, langostinos, rollitos de anguila o cordero lechal.

356.346 de euros ha sido la factura de una cumbre donde se han tenido que tratar temas tan delicados como una inflación alimentaria aguda que podría devolver a la pobreza a más de 100 millones de personas o los precios de alimentos y combustibles que amenazan con agravar la situación de la economía mundial.

EEUU privatiza las ganancias, socializa las pérdidas. Aquí también está pasando

Privatizar las ganancias, socializar las pérdidas. No es un mal sueño. Está pasando en EEUU. Con total impunidad. El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, dijo ayer, 8 de julio de 2008, que muchos estadounidenses tendrán que resignarse a perder su vivienda, "pese a los esfuerzos por impedirlo que realiza el Gobierno". Fue en un foro para analizar la crisis hipotecaria en Arlington (Virginia). El mismo foro en el que el presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernanke, aseguró que considera extender los préstamos de emergencia a las firmas de Wall Street para ayudarlas a superar los problemas crediticios que afrontan. A ellas, sí. A los hipotecados, no. Curioso... Aquí también puede pasar.